5 recomendaciones para protegerse del sol
El melanoma es uno de los cánceres de piel más frecuentes en Europa pero, también es uno de los que más se cura si se detecta a tiempo. Se calcula que aproximadamente el 90% de este tipo de cáncer es curable. El melanoma maligno es una grave variedad de cáncer de piel, causante de la mayoría de las muertes relacionadas con el cáncer de piel. Se trata de un tumor generalmente cutáneo, y altamente invasivo por su capacidad de generar metástasis. Tumbarse a tomar el sol además de ser uno de los hábitos más frecuentes en verano, puede ser también muy dañino para la piel. Por eso, toda precaución es buena para combatir la aparición de este tipo de tumores.
Vigilar las pecas y lunares que tenemos en el cuerpo, protegerse del sol y acudir con regularidad al dermatólogo son las tres pautas principales que hay que hacer para evitar la aparición de este tipo de cáncer. Además de una serie de recomendaciones que hay que seguir cuando nos exponemos al sol.
¿Cuáles son los factores de riesgo de la aparición del melanoma?
Especialmente, las precauciones para evitar su aparición deben aumentarse en el caso de que se den alguna de estas circunstancias:
Las pieles claras o aquellas que tienden a quemarse con facilidad son más propensas a ser atacadas por este tipo de cáncer
Una exposición excesiva al sol bien sea por trabajo o por otras circunstancias
Antecedentes familiares de cáncer de piel o similares que puedan ser hereditarios
Uso frecuente de las cabinas de bronceado artificial
Pieles pecosas o con tendencia a la aparición de lunares o manchas producidas por la exposición al sol.
La precaución es una regla básica para combatir este tipo de enfermedad en la piel. Algunas de las que puedes seguir para mantener tu piel a salvo de los peligros del sol son las siguientes:
1.Limitar las elevadas exposiciones al sol sobre todo, en las horas de máxima peligrosidad que son entre las 11:00 y las 16:00 horas. Durante este tiempo, mejor resguardarse bajo la sombrilla y seguir disfrutando de un día de sol pero protegidos.
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2.Protege tu cara con cremas solares de alta protección y no olvides que tus ojos también pueden sufrir tras una larga exposición solar, así que las gafas de sol, siempre contigo.
3.Usa gorra o sombrero en tus ratos al sol y camiseta para proteger la zona del torso
4.Ponte crema en la piel al menos, cada dos horas
5.Vigila especialmente a los más pequeños ya que la piel de los niños es una de las que más sufre las consecuencias de los rayos del sol.
Y con todos estos consejos ya puedes disfrutar del sol cuidándote.
Ah! Y no olvides visitar a tu dermatólogo para que revise tus pecas y lunares.
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